Schindler pondrá los ascensores en Expoagua

No me digan que no es una sospechosa casualidad que el concurso público para la colocación de los ascensores en los recintos expo, se haya adjudicado a la empresa Schindler, que a su vez hace un mes se convirtió en patrocinadora del evento.
Las buenas prácticas en gobierno corporativo de las empresas, tan de moda ahora, y tan necesarias siempre, deberían descender a lo concreto, y demostrar transparencia absoluta en estos casos que parecen cumplir la máxima latina del Do ut des (Doy para que me des). Schindler suministrará más de cien ascensores a la Expo de Zaragoza por un importe de más de cuatro millones de euros, hecho que ha coincidido con la incorporación de Schindler como patrocinador. No es ni mucho menos una acusación. Sé de la excelente y profesional gestión de Schindler, así como de su dilatada experiencia en cubrir este tipo de eventos (ya estuvo presente, por ejemplo, en la expo de Sevilla-, pero en todo caso, creo que sería conveniente transparentar al máximo este tipo de operaciones para que no quede resquicio alguno a sombra de sospecha. Por ejemplo, podrían explicar por qué no se han concedido al Grupo Thyssenkrupp Elevadores, grupo al que se le han encargado el diseño, fabricación, suministro y mantenimiento de las escaleras mecánicas y rampas móviles en el recinto de Ranillas, el concurso también relativo a los ascensores. Es de suponer que la adjudicación del proyecto global a una sola empresa, supondría un precio más competitivo. Seguro que todos nos quedaríamos más tranquilos si este tipo de operaciones se explicasen milímetro a milímetro. La mujer del César, ya saben.